El primer capítulo lo cerré durante los festejos del jueves santo con los amigos de Grañón, en el que comimos calamares mientras afuera llovía con frío. Fue un poco raro volver al albergue y no tener cosas por hacer, o gente para atender. De cierta forma fue un momento relajado pero también un poco melancólico. Pero en fin, eso también indica que la experiencia fue muy buena.
Hoy viajé finalmente hasta el País Vasco, a San Sebastian, que ya es parte del Camino del Norte.
El Camino de Santiago en San Sebastian se encuentra documentado desde épocas medievales. Muchos de los peregrinos que marchaban a Santiago paraban en el Monasterio de San Sebastian, que se ubicaba en los terrenos donde hoy está el Palacio Miramar. También existió una orden Templaria junto al actual puente de Santa Catalina. La ciudad era una referencia para los caminantes que evitaban el paso de los Pirineos para acceder a España por su bahía, la de La Concha.
Yo hice el turismo necesario y después me senté en la playa de esta bahía a planear un poco la etapa de mañana, que serán unos 23km.
Ahora toca armar la mochila para empezar a caminar mañana! Entre la gente que conocí en el albergue, algunos de ellos ya lo habían recorrido y entonces me dieron algunos consejos muy buenos. También quedé encargada de llevar una vieira y un saludo de un español (Toñin) para una hospitalera de Villaviciosa, que es una localidad cerca de Gijón por donde pasa el camino.
Después a descansar, que mañana cuando salga el sol yo voy a salir con el, sino antes.
El Camino de Santiago en San Sebastian se encuentra documentado desde épocas medievales. Muchos de los peregrinos que marchaban a Santiago paraban en el Monasterio de San Sebastian, que se ubicaba en los terrenos donde hoy está el Palacio Miramar. También existió una orden Templaria junto al actual puente de Santa Catalina. La ciudad era una referencia para los caminantes que evitaban el paso de los Pirineos para acceder a España por su bahía, la de La Concha.
Yo hice el turismo necesario y después me senté en la playa de esta bahía a planear un poco la etapa de mañana, que serán unos 23km.
Ahora toca armar la mochila para empezar a caminar mañana! Entre la gente que conocí en el albergue, algunos de ellos ya lo habían recorrido y entonces me dieron algunos consejos muy buenos. También quedé encargada de llevar una vieira y un saludo de un español (Toñin) para una hospitalera de Villaviciosa, que es una localidad cerca de Gijón por donde pasa el camino.
Después a descansar, que mañana cuando salga el sol yo voy a salir con el, sino antes.
