El jueves vinieron 4 peregrinos: Runa de Dinamarca, Maximilian de EEUU, Marco de Italia y Antonio de España.
Uno de ellos vió los dibujos del cuaderno y me pidió que dibujara en su credencial de peregrino en el lugar del sello. A mi me encantó el pedido y lo hice, y después también dibujé la credencial de todos los demás.
Hicimos las actividades de siempre y además fuimos todos a el bar que está enfrente, para tomar unos vinos de la región donde está Grañón: La Rioja.
Ayer viernes los peregrinos del albergue fueron solamente una pareja de coreanos, por lo que el trabajo lo hicimos bastante rápido. A ellos también se les ocurrió la idea del dibujito en la credencial, asique se lo llevaron.
Durante el día a veces pasan peregrinos que van al siguiente pueblo, pero igual paran un rato acá para visitar el edificio. Pasaron tres ingleses preguntando si podían visitar la torre, asique no hubo más que agarrar las llaves del campanario y subir con ellos como guía, lo que me pareció muy divertido, ya que no creo que vuelva a tener las llaves de la torre de una iglesia del s.XVI. Por suerte vinieron dentro del horario entre en punto e y media, asique no hubo campanada. (Cuando yo subí la primera vez, justo me paré abajo de la campana en el cambio de hora). Después el tour lo seguimos yendo a ver el retablo y la iglesia desde el coro elevado.
Durante el descanso de ayer a la mañana salí a seguir un poco el Camino, que recorre el paisaje verde y rural de La Rioja.
Hoy fuí por un desvío del camino para llegar hasta la ermita de Carrasquedo, que está adentro de un bosquecito a 1.5km de Grañón.
Todavía hace frío, pero ya empiezan a aparecer los días soleados y despejados
